Pese a ello, el evento fue realizado en cuatro sedes, la segunda menor cantidad en la historia de las copas mundiales: Arica, Rancagua, Santiago de Chile y Viña del Mar. Éstas, corrieron a cargo de los periodistas italianos Antonio Ghirelli y Corrado Pizzinelli que escribieron una nota para el periódico italiano «Il Resto del Carlino» hablando sobre la precaria situación de la capital Santiago de Chile. Las franjas rojas muestran una sutil impresión del escenario.